Sigo vivo y esas cosas, y tengo que hablaros del motivo por el que he estado ausente estos días. Sos acordáis cuando hace un par de meses os dije lo a gusto que había estado el primer día de prácticas en Keramex y que parecía haber muy buen ambiente y que lo único malo eran las prácticamente nulas perspectivas de quedarme en la empresa cuando terminase las FCT, ¿verdad? Pues mis peores presagios se han cumplido y desde entonces he acabado conociendo el peor lado del mundo laboral (o al menos parte de él). Atención que se viene un tocho de los míos, y es especialmente largo, que hay mucha mierda por largar.
Las cinco primeras semanas las pase en la zona de recepción, en las que me dejaban ir haciendo distintas tareas (no todas eran de comercio internacional, pero por lo menos no me tenían aburrido ni me obligaban a hacer cosas que se alejasen mucho de aquello para lo que me había estado preparando en el instituto), y lo cierto es que las disfruté mucho, hasta el punto de ue llegué a coger bastante confianza con la recepcionista y con otra chica que estaba en prácticas por el ciclo de Administración y que de vez en cuando estaba por allí también haciéndonos compañía mientras estaba con sus labores. Mientras tanto, mi compañera de clase estuvo con la encargada de exportación. A pesar de lo bien que fui congeniando con todos los compañeros de trabajo, ya fui viendo cosas de estas que no ayudan al buen ambiente, principalmente canalizadas en la figura de una tipa que lleva 33 años en la empresa y que está pegando la bronca cada dos por tres a la gente por no hacer las cosas como a ella le gusta que se hagan, llegando hasta tal punto de tener enganchones incluso con el hijo del jefe, que es el que está destinado a encargarse de la empresa cuando a su padre le dé por jubilarse. Ah, sí, y la que es nuestra tutora de las prácticas en la empresa y una de las jefas de Keramex es también hija del jefe. Con esto ya van dos de los clásicas situaciones que hacen que las empresas de este país sean por lo general sitios en los que da tantísimo gusto trabajar.
Poco antes de que nos tocara a mi compañera y a mi cambiarnos los sitios para completar las siguientes 200 horas de las FCT, se piró de la empresa el chico que había entrado unos años atrás y que en ese momento era el jefe en segundo lugar de la empresa. En principio, le contrataron para que fuera él quién sucediera al jefe y por ello le dieron la libertad de tomar decisiones que pudieran ayudar a mejorar la empresa en esa etapa de transición. Pues total, como la tipa esta que os he comentado antes sudaba de hacerle caso en lo que respectaba a las decisiones que tomaba y el jefe tampoco parecía preocupado por hacerle mucho caso, dijo "a tomar por saco, me piro y busco un sitio donde de verdad pueda sentir que valoran mi opinión y en el que me dejen hacer lo que realmente se supone que debo llevar a cabo". Él era un sol y realmente tenía buenas ideas para llevar una mejor gestión de la empresa, así que ya eso me empezó a dejar bastante mosca.
Siguiendo con el enchufismo, deciden que van a contratar a la otra chica que está en prácticas, la cual se conoce que ya entró por aquello de que su padre y uno de sus hermanos trabajan en la empresa. Esto a mi compañera y a mi nos sentó como un tiro, pero bueno, yo pensé que la pobre chica tampoco tenía la culpa así que no se lo eché en cara, no así mi compañera, que con eso de que tiene 57 años le echó en cara lo injusto de la situación y le dijo que ella se merecía mucho más quedarse por los años de experiencia que tenía. La cosa seguía yendo a mejor para que el ambiente fuese lo más relajado del mundo.
Total, que la semana de antes de hacer el cambio de turnos, deciden que a mi compañera la van a mandar a la zona de cargas en vez de a recepción, porque esa zona se la habían quitado hace poco a la veterana barrullera para dejarla solo al frente de recursos humanos, y así podía controlar al nuevo encargado de esa parte de la empresa e irle informando de como llevaba a cabo la labor. La excusa es que así aprendía otras labores distintas de la empresa y ayudaba a las compañeras que están en ese zona, que es verdad que es donde más faena suele haber, y también es verdad que así aprendía otras labores importantes, pero vamos, que en realidad era una pantomima para que la trepa esta pudiese controlar su antiguo puesto desde las sombras. Llegados a este punto, la recepcionista me empieza a decir que no sabe la suerte que tengo de no poder quedarme en la empresa cuando termine las prácticas, que así luego puedo ir a trabajar a algún sitio normal, y que de hecho ella misma estaba en ese momento mirando ofertas de trabajo para pirarse.
Total, que empezamos la segunda mitad de nuestra estancia en la empresa y yo me quedo con la encargada de exportación, gracias a lo cual empiezo a hacer faenas nuevas relacionadas con lo que había venido estudiando, así que a pesar de todo lo malo, en ese aspecto yo seguía yendo muy a gusto y no tenía queja alguna, es más, empezaba a lamentar el que la cuenta atrás fuera avanzando y que cada vez me quedase menos de prácticas.
Pero cuando todo parecía ir un poco a mejor, al jefe se le cruzan los cables y despedir a la encargada de diseñar los paneles que comercializa la empresa, según él porque no tenía ni puñetera idea de que pintaba la chica en la empresa y porque para el trabajo que estaba haciendo, cualquier otra persona podía hacerse cargo. La chica era muy buena en lo suyo y realmente era vital para la empresa, pero bueno, si el jefe chochea y se pensaba que no pintaba nada, pues él sabrá si quiere que la empresa se vaya un poco a tomar por culo, que seguro que ella no tarda demasiado en encontrar un sitio donde realmente la valoren y sepan darse cuenta de lo buena que es en lo suyo.
Por otro lado, un día de esos viví en directo como la tipeja insoportable le recriminaba a la recepcionista una cosa que había hecho para facilitar la labor a las compañeras de cargas, diciéndole que ella no tenía porque pensar nada y llamándole tonta a la cara de manera poco disimulada, insistiendo nuevamente en que todo tenía que hacerse como a ella le diera la gana. La pobre chica dijo que no aguantaba más y se fue a hablar con la para que la despidiera porque no aguantaba más el maltrato psicológico, a lo que le replicó que no podía despedirla porque era imprescindible para la empresa y le dijo que hablaría con la otra para que se portase mejor. Salió con lágrimas en los ojos de su despacho y con la determinación de pirarse lo antes posible de la empresa.
Por si todo esto os parece poco, esta semana ha llegado la puntilla. El lunes nos reunimos los 3 que estamos con la misma tutora para el tema del proyecto final de ciclo, con miedo de que nos cayera una reprimenda por presentarnos sin nada hecho del trabajo aún (en mi caso solamente tenía el guión pensado). Nos comentó que no pasaba nada, que era lo normal y que todos los años pasaba lo mismo, pero que por favor esta semana nos pusieramos a ello sin falta, porque aún teníamos 3 semanas de margen y si no se nos iba a echar el tiempo encima.
Total, que el lunes comenté en la empresa que necesitaba información y documentos para ponerme con el trabajo y me dijeron que iban muy apurados con el trabajo, que se lo recordase al día siguiente. El martes hubo la misma cantinela. Y el miércoles pasó lo mismo, a lo que se sumó la gota que colmó el vaso: Como mi compañera le suplicó a nuestra tutora en la empresa que la contratasen si podía ser por aquello de que por el tema de la edad lo tenía complicado para encontrar trabajo, decidieron así de repente que sí, que la contrataban, a cambio de despedir a 3, la que estaba en la zona de cargas que llevaba 8 meses de baja por maternidad, y las 2 que estaban supliéndola a jornada partida durante ese tiempo (una está de 8 a 14 y la otra de 14 a 18). A mi compañera la quitaron de cargas para ponerla de nuevo a ayudar a la que lleva el tema de exportación, e incluso a la de nacional si hacía falta, y a la recepcionista la enviaron a cargas para que se pispase en semana y media del que iba a ser su trabajo a partir de entonces.
Total, que entre que seguían sin darme la información que necesitaba para el trabajo, y el ver como de repente me quitaban las faenas que llevaba a cabo las últimas semanas a cambio de darme la nada agradable tarea de informar de impagos a los clientes (que a los que podía enviárselo por mail aún tira que te vas, pero con algunos me tocó llamar por teléfono y la situación era muy desagradable y violenta), me pegó una crisis de ansiedad de tres pares de cojones al volver a casa entre que me sentía ninguneado y que me veía que no iba a llegar a tiempo de presentar el proyecto.
Por suerte, el jueves y el viernes al fin se dignaron a darme la información que necesitaba y la encargada de exportación se acordó de repente de que existía y me fue dando de vez en cuando alguna faena, así que por lo menos lo peor ya ha pasado y estoy mucho mejor de ánimos. La cosa está en que a ver cómo se las apañan a partir de cuando yo termine, porque mañana la que era la recepcionista e iba a estar en la zona de cargas ya no va a ir, ha hablado con la jefa y le han dejado por fin pillarse la baja voluntaria para encontrar algún sitio en el que pueda estar verdaderamente a gusto trabajando. Es una pena, porque es con la que más confianza tenía y hemos llegado a intimar bastante, pero como sé que es por su bien, me alegro de que finalmente haya podido decir adiós a la empresa. Y bueno, al menos salgo ganando otra amiga
(y sí, solo amiga, que la chica tiene novio y están por irse a vivir juntos ya e hipotecarse).
Ah, bueno, y el domingo pasado me levanté con una contractura brutal en el cuello, por lo que he estado hasta hace un par de días con relajantes musculares, lo cual me llevó a quedarme sopa nada más llegué a casa el jueves entre unas cosas y otras. Y ya el viernes, como siempre, es el día que más apurado voy de tiempo para ponerme con el ordenador (ni enchufarlo pude) y ayer quedé con mis amigos irl para comentarles todo este tema.
Ya me jode no haberme podido pasar de nuevo hasta ahora, porque sabéis lo mucho que os aprecio y merecíais que os contara la historia con todo lujo de detalles, pero por las circunstancias no ha sido hasta ahora mismo que he podido volver al redil. En fin, disculpad por la pedazo turra que os acabo de dar (creo que va a ser mi récord en ese aspecto), pero necesitaba desahogarme también por estos lares y haceros sabes mi situación. Que suerte que solamente me quedan ya 6 días (el día 5 de Junio termino), porque sinceramente, a pesar de que sigo haciendo el trabajo a gusto, lo negativo está empezando a no compensarme lo positivo. Pero bueno, de todo se aprende, y desde luego como experiencia esto me va a sentar mucho mejor incluso que el tiempo que estuve en Argot. Si me véis ausente estos días de nuevo es porque estoy a tope con el proyecto de final de ciclo, pero bueno, trataré en la medida de lo posible de mantener el ritmo que venía llevando desde que ha comenzado el año de pasarme cada día.
Ah, y por cierto, por desgracia acabaste acertando con la predicción que hiciste hace unas semanas, Kona.