Este si que era grande, con mayúsculas y en negrita.
No tuve el placer de verlo jugar más allá de visionar vídeos en Youtube, pero joder, era la bomba y como entrenador cambió todo para el Barça, dejándolo en una dinámica ganadora que aún perdura.
Descansa en Paz, Johan.
En el cielo deben estar contentos hoy, les ha llegado tu genio, tu frescura, tu calidad, tu soltura.
Aquí abajo los seguidores del fútbol lloramos tu pérdida, más allá de colores y fanatismos, fuiste de los más grandes de la historia.
Gracias, Johan.