Que el modo de diversión de un personaje se defina como "volar una ciudad y que no queden supervivientes" o que la forma de curar un constipado sea "meter los pies en aceite hirviendo" son algunos de los elementos utilizados como críticas a la serie Bob Esponja, que se emite en el canal infantil Clan TV. Críticas que han llevado a TVE a estudiar que tenga una calificación 'no recomendada a menores de 7 años'. Según informan desde la cadena, esta revisión se hará a toda la programación del canal.
La consideración se produce a raíz de la petición del Defensor del Espectador, Ángel Nodal, quien recoge que genera "malas prácticas" entre los menores o "exaltación del terrorismo y la violencia" según el informe trimestral elaborado por su oficina en el periodo de octubre a diciembre. "Evidentemente los niños muy pequeños son más indefensos a determinados mensajes audiovisuales, pero en última instancia depende de cada menor", explica el psicólogo y pedagogo Vicente Martínez Otero.
El responsable de Programas Infantiles de Televisión Española, Yago Fandiño, explicó que habrá una respuesta "objetiva y seria" ante esas peticiones. A pesar de que la serie tiene ya esta calificación en Estados Unidos, recuerdan que varía entre países. "Es algo dinámico, hay que ver pequeños matices", explicó, recordando que es una serie infantil "que juega mucho con la parodia".
Precisamente en la parodia se sitúa el punto de las quejas, ya que se ve a los protagonistas enterrar a un inspector de sanidad muerto accidentalmente en su restaurante o explicar que para curar un resfriado hay que meter los pies en aceite hirviendo. "La organización moral del menor es más elaborada a medida que va creciendo, por lo que se entiende que hasta los seis años estas escenas puedan llevar a un menor a experimentar hechos peligrosos", añade el experto.
Cuidar el mensaje
Fandiño ha aseverado que la decisión de adquirir contenidos es "colegiada" entre varios departamentos de la televisión pública, afirmando que, en ocasiones, ha tenido que renunciar a series infantiles de éxito internacional "aun sabiendo que iban a funcionar muy bien" debido a la importancia de que "cumpliese determinados valores". "Al final no hay nada negro ni oscuro, aunque sí es verdad que esas tramas para los más pequeñines pueden resultar un poco confusas. Cuando recibimos quejas de este estilo, procuramos retirar temporalmente el episodio de la parrilla de programación, volverlo a visionar con calma y reflexionar sobre los matices que nos traslada la audiencia", ha señalado.
os expertos coinciden en que los dibujos tienen que cuidar el mensaje que lanzan, los valores. En el público infantil va calando el mensaje, no solo el lenguaje sino también el audiovisual. A medida que el niño crece hay una mayor capacidad reflexiva, pero los muy pequeños son indefensos a los mensajes. "En términos generales no es aconsejable favorecer casos extremos que puedan llevarles a experimentar hechos peligrosos", afirma Martínez Otero. "Hay un posible gesto de imitación".
En el informe sobre el código de protección a la infancia y la juventud recientemente hecho público por esta Oficina, la serie Bob Esponja se convertía en el espacio que más quejas generaba, entre ellas por "inducir a las malas prácticas" entre los menores o "exaltación del terrorismo y la violencia"
"Violencia innecesaria"
La Universidad de Granada realizó el pasado año un estudio de más de 163 series con el análisis de más de 600 personajes. Estableció por tanto un ranking de las series más recomendadas para los menores y otro de las menos recomendadas. Precisamente en este último se encontraba Bob Esponja junto a Shin Chan, Doraemon o Monster High. De Bob Esponja destaca que refleja “una violencia verbal y física absolutamente innecesaria, que se emplea con el único objetivo de crear el chiste y la gracia fácil.
Una violencia que raya el sadismo”, refiriéndose a una escena donde le sacan los ojos a un personaje. Otro estudio publicado en la revista Pediatrics añadió a la serie "dificultad de aprendizaje". Realizado en niños de cuatro años, edad clave para el desarrollo infantil, establecía que los menores que ven esta serie tienen más problemas de atención y comprensión que los que ven otras series de dibujos más lentas y tranquilas como pudiera ser Caillou.
Hemos vuelto a los 90 con los Simpson a las 23h y en La2