Será el próximo 23 de septiembre en Singapur cuando se reúna el Consejo Mundial que tiene que ratificar el precalendario de Fórmula 1 para la próxima temporada. Ese día se decidirá si en 2012 el GP de España se disputará el 13 de mayo en Valencia o si se sigue haciendo en Barcelona como hasta ahora. En estos momentos todo apunta a que será en el circuito valenciano.
El pasado fin de semana, coincidiendo con el GP de Europa, Bernie Ecclestone mantuvo varias reuniones con delegaciones de la organización de ambos grandes premios. Estuvo directamente con Francisco Camps, presidente de la Generalitat Valenciana, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá y representantes de Valmor, Jorge Martínez Aspar y Fernando Roig. En ese encuentro los valencianos pidieron un adelanto de fechas al gran jefe de la F-1, manifestaron su compromiso con este deporte como eje de la presencia de la ciudad en el mundo y su intención de aumentar el número de años con el gran premio.
La ilusión de Valencia contrasta con las palabras del presidente de la Generalitat Catalana, Artur Mas, que nada más llegar al cargo dejó claro que la F-1 era importante, pero que tendrían que revisar algunos aspectos. La situación económica que se encontró era, según sus palabras, peor de lo esperado y los recortes han llegado a todas partes. A pesar de eso, Salvador Serviá, en su comida con la prensa de presentación como director del circuito, aseguró que tenían intención de continuar con el gran premio. De hecho Barcelona tiene firmado hasta 2016 con la FOM para hacer la carrera y además con el patrocinio del Banco Santander. Es decir tienen también fundamentos para continuar.
Desde la Federación Española, su presidente y vicepresidente de la FIA, Carlos Gracia se agarra a lo escrito: "En estos momentos los dos grandes premios tienen contrato de larga duración y el precalendario está aprobado con las fechas correspondientes para cada uno, 13 de mayo en Montmeló y 1 de julio en Valencia. Ahora veremos qué sucede en Singapur". En Valencia, tanto el presidente del Consorcio del Circuit de Catalunya, Vicens Aguilera, como Sebastiá Salvadó, del RACC, se reunieron con Ecclestone en dos ocasiones, mañana y tarde, y a la salida sus caras no eran, precisamente, de alegría tras el encuentro.
Los dos grandes premios pueden convivir, este año entre ambos juntaron 333.191 personas (170.130 en los tres días de Montmeló y 163.061 en Valencia), pero uno sólo sería un éxito mayor. La cuestión es que Ecclestone no quiere dos grandes premios en el mismo país y que si Valencia se quedase con el GP de España tendría la oportunidad de ceder su fecha, por ejemplo, en Roma. En Valencia no piden que desaparezca la carrera catalana, pero estarían encantados con ser la única en España. Además, según SER Valencia han renovado hasta 2021 por 18 millones de euros por gran premio. Valencia quiere un gran evento deportivo de motor en la ciudad, no está firmado, pero el acuerdo es un hecho.
Vamos, que bye bye Montmeló (histórico circuito) y solamente nos quedamos con el soso circuito de Valencia.
La pasta manda, supongo.