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Las negociaciones entre las editoras de videojuegos y el sindicato SAG-AFTRA no han llegado a buen puerto y en consecuencia han iniciado una huelga. Los dos principales puntos de desencuentro son la falta de transparencia y las compensaciones por ventas.
El sindicato reclama que los actores puedan conocer el juego en el que trabajarán antes de iniciar el proyecto, pero las editoras solo están dispuestas a revelar el rol del personaje. En la parte económica los estudios de videojuegos están de acuerdo en pagar una bonificación en función del número de las sesiones de doblaje, pero se niegan a pagar más si el juego supera los 2 millones de unidades vendidas.
La huelga afecta a los actores de voz representados por SAG-AFTRA que trabajen en juegos de Activision, Disney, Electronic Arts, Insomniac Games, Take-Two y Warner Bros. Games.
Fuente: Gamasutra
Poca broma, veremos como resulta todo esto.
